La boda de A&J se nos presentó como un gran reto, compaginar dos estilos y decoraciones muy distintas. Si la ceremonia se celebraba en una pequeña ermita en un caserío de la familia de Alazne, el banquete y la fiesta era en el hotel más urbanita de Bilbao, el Domine, obra del diseñador Javier Mariscal. Sin embargo, dimos con la tecla y lo conseguimos con creces gracias a sus alter egos, la pareja de novios de playmobil, una paleta cromática muy particular, las flores y sobre todo al mezclar dos aficiones de nuestros novios: la fotografía y el monte.

Durante meses, A&J subieron los montes más emblemáticos de la zona con sus homónimos  y los fotografiaron coronando sus cimas, imágenes que sirvieron para ilustrar los meseros y el seating, sin embargo os diré que los clicks llegaron a lo más alto de la tarta nupcial pero también acompañaron a los recién casados a su luna de miel.